9/9/10

DESENCUENTRO

Desde el día 20 de junio que no la veía, que no la tenía entre mis dedos. He pasado mucho tiempo esperándola ansioso, deseoso de gozar de nuevo con ella, y eso que sabía que ha pasado por otras manos, por otras miradas. Y lo ha hecho porque yo mismo la he entregado a otros para que escarben en cada rincón de su fisonomía con el objetivo de que me digan cuáles creen que son sus defectos.
Durante este tiempo he estado pensando casi continuamente en ella, recorriendo mentalmente cada rincón de su cuerpo, analizando meticulosamente las opiniones de los que la han gozado, pensando qué sí y qué no hay que modificar. Y cuando ha pasado ese periodo de reflexión que me había dado, cuando por fin nos hemos vuelto al ver las caras, no me he atrevido a decirle nada, a mirarla casi siquiera. Lo único que he hecho ha sido borrar la primera página, porque con los cambios que tengo previstos ya no tiene sentido (en ella sólo estaban escritas las vocales, primero en mayúsculas y debajo en minúsculas). Después he cortado el primer capítulo, mentira, el Capítulo Cero, y lo he pegado al principio del Segundo Capítulo. Este Capítulo Cero se me ocurrió cuando ya estaba concluida la novela. Como me gustaba, pero no tenía claro dónde ponerlo, lo metí al principio, pero se me quedaba cojo, necesitaba algo más. Ahora ya tengo en mente ese algo más, por eso le he buscado una mejor ubicación.
 Y ya está, eso fue todo: guardar como, y a su carpeta correspondiente. Me hubiera gustado que el reencuentro hubiera sido de otra manera, más cálido y menos distante. Espero que la próxima cita sea la que nos una de nuevo como antes.

1 comentario:

Pepe del Montgó dijo...

Copiar, cortar y pegar es uno de los mejores hallazgos de la humanidad. Las palabras y la organización de esas palabras es lo más difícil